La Trenza de la Justicia

Por Gustavo Molina

De vendedor de sándwiches en Tribunales II a Doctor Ariel. Podría ser la historia de un joven que a fuerza de sacrificio logró un título universitario. Pero la historia de Juan Ariel Cejas (38) es otra: el viernes pasado el fiscal Horacio Vázquez lo imputó y ordenó su detención por el delito de estafas reiteradas. “El Ariel” como lo conocen desde jueces del Tribunal Superior de Justicia (TSJ), el fiscal General Alejandro Moyano, hasta familiares de delincuentes, fue detenido ayer a la mañana cuando entraba solo a Tribunales II donde iba a entregarse. El comerciante gastronómico está acusado de cobrar coimas para lograr la liberación de esos delincuentes en cuestión de horas. Ese dinero, en parte quedaría para el propio Cejas y otro porcentaje, para la trenza que integrarían funcionarios judiciales y abogados penalistas; eso es lo que está investigando el fiscal Vázquez.

El pasado lunes 27 de mayo, antes de que se conociera la orden de detención contra Cejas, el fiscal Mariano Antuña de la Cámara 12ª del Crimen denunció que antes de conocerse la sentencia a un detenido que estaba siendo juzgado; la madre de ese sospechoso le dijo al fiscal que le había pagado $ 150 mil a Ariel Cejas para que no fuera a prisión. Finalmente el sospechoso fue condenado a siete años de cárcel y la mujer denunció que Cejas no había cumplido con la promesa de libertad.

La investigación contra Cejas comenzó hace aproximadamente dos meses, cuando la abogada Mónica Picco denunció que el “Doctor Ariel” –algunas veces Cejas se hacía pasar por abogado penalista- junto a otros abogados cobraba importantes sumas de dinero a familiares de detenidos para lograr su liberación.Esa trenza judicial ilegal estaría integrada, además, por fiscales y magistrados del Poder Judicial cordobés.

El nivel de vida, la ostentación de autos de alta gama, dan cuenta del crecimiento exponencial que tuvieron las finanzas del chico del carrito de sandwiches que ingresó a fines de los 90 a vender en Tribunales I, apadrinado por el reconocido ex fiscal Juan Marcelo Sammartino.

“No hay nada de eso. Mi cliente es conocido en Tribunales hace más de 20 años. Vendía sándwiches en un carrito cuando toda la Justicia funcionaba en Tribunales I; imagínese. Yo le dije que esperáramos hasta el lunes a presentarse ante la Justicia. Ariel Cejas es inocente de lo que se lo acusa. Es un muchacho trabajador; conoce a jueces, fiscales, abogados desde que eran pinches de Tribunbales; hicieron carrera juntos, ellos en la Justicia y mi cliente como comerciante gastronómico de Tribunales. Antes tenía los puestos de sándwiches en Tribunales y ahora tiene un bar frente a Tribubnales II, es un comerciante exitoso. Incluso realiza el servicio de catering al Tribunal Superior de Justicia y a la Fuerza Provincial Antinarcotráfico (FPA), es un comerciante conocido en Tribunales, no un delincuente”, le dijo su defensor, Juan Domingo Gacitúa a Alcatraz Revista.

El defensor de “El Ariel” agregó que “es muy poco serio decir que mi cliente le cobró $ 150 mil a una mujer para que no condenaran a su hijo, que recibió siete años de cárcel ¿dónde están las supuestas gestiones de Cejas? Es irracional la acusación contra mi cliente, es un chivo expiatorio, es una factura que le están pasando a alguien y la tiene que pagar él”.

Gacitúa señaló que “el jueves, Ariel Cejas entró a los despachos de jueces y fiscales como lo hace todos los días, les ofreció el menú; incluso estuvo en la fiscalía del doctor Vázquez”. También le contó a Alcatraz Revista que Cejas “los miércoles juega al fútbol con el fiscal (Pedro) Caballero y los jueves con el fiscal General Moyano”; dando cuenta de la familiaridad que el ahora comerciante detenido tiene con la familia judicial cordobesa. Desde el grupo de fútbol de los jueves, Abrazo de Gol, donde jegan con casacas albinegras y azulgranas desmintieron que Cejas participe de los partidos.

“¡No hay riesgo procesal, dónde se va a escapar mi cliente!; trabaja hace 20 años en Tribunales. Es totalmente falsa la acusación como quedó demostrado en el primer juicio, que él salió absuelto, no hay ningún elemento que permita acreditar la participación de él en esos hechos. Ariel es un chico que tenía un kiosco y un montón de abogados dejaban sobres y plata. El delito de estafa es excarcelable. Pero este terremoto se va a convertir en un tsunami; mi cliente está dispuesto a colaborar, a dar nombres”; redobló la apuesta Gacitúa.

Ayer, tras la espectacular detención de Cejas en la entrada de Tribunales II por parte de policías de Delitos Económicos –el comerciante fue a entregarse y los agentes montaron un show–; Gacitúa se mostró muy nervioso al cruzarse con la abogada denunciante Picco.Incluso testigos del cruce de Gacitúa y Picco señalaron a Alcatraz Revista que “los insultos y las amenazas ocurrieron cerca de los carritos de Ariel en planta baja y se escuchaban desde el primer piso”. La abogada Picco se dirigió a la fiscalía de Guillermo González y denunció a Gacitúa por amenazas. El fiscal González tomó la denuncia y la derivó a Mesa de Entradas donde la causa será sorteada.

No es la primera vez que Cejas y su hermano Raúl Iván Cejas aparecen involucrados en una red de tráfico de influencias: en 2016 “El Ariel” declaró en el juicio contra el fiscal Roberto Matheu y los abogados Carlos Morelli y Marcos Juárez. En ese juicio, Juan Ariel Cejas declaró que 13 años antes, en agosto de 2003, había llevado un sobre al despacho de Matheu con dinero para lograr la libertad de seis presos.

Según la acusación, el fiscal Matheu, que finalmente fue condenado a 6 años de prisión, había cobrado esa coima para liberar a los seis sospechosos que habían sido detenidos en Río Primero. En agosto de 2011, el delasotismo mediante un jury de la Legislatura había destituido al fiscal Matheu.

Morelli, abogado defensor de esos detenidos, les exigió $ 2.000 para pagarle la coima al fiscal Matheu para que los liberase. Sin embargo, en el juicio quedó demostrado que la libertad de esos detenidos se logró por una orden dictada a las 11.35; mientras que el llamado extorsivo del abogado Morelli a los familiares de los seis presos, fue a las 13.09; cuando ya estaban libres hacía dos horas.

Respecto de Marcos Juárez, Ariel Cejas había declarado que en su puesto de sándwiches en Tribunales II recibió un sobre con dinero de este abogado, quien le dijo “que lo iba a venir a buscar el Dr. Matheu, y que él se fijó y era plata, agregando que no estaba cuando lo retiró Matheu”, según declaró en el mismo juicio.

Y su hermano Raúl Iván Cejas, en cuanto también hizo referencia a un sobre que un abogado le dejó en 2002 -14 años antes de su declaración- en el carro para el fiscal Roberto Matheu, aclarándole “…acá te dejo esto para Matheu, él después lo pasa a buscar… te lo dejo porque no está en el despacho…”.

En noviembre de 2014, Raúl Iván Cejas había sido condenado por la Cámara Primera del Crimen a 11 años y seis meses de cárcel por un robo calificado. Pero el 16 de septiembre de 2016, dos días después de que terminara el juicio que condenó al fiscal Matheu; Cejas recibió el beneficio de la prisión domiciliaria  “para cuidar a su padre gravemente enfermo”, según explicó el propio condenado y sus familiares. Al padre de Ariel y Raúl Cejas, sólo lo podía cuidar su hijo preso. En el ambiente judicial de Córdoba señalaron que esa prisión domiciliaria fue un pago por haber declarado en contra de Roberto Matheu.

En ese mismo juicio, los abogados Morelli y Juárez, fueron hallados responsables de cohecho activo agravado y condenados a dos años y medio de prisión en suspenso. Juárez incluso fue inhabilitado a ejercer la profesión por el mismo tiempo de la condena. Morelli, quien había declarado como arrepentido que le pagó coimas a Matheu, siguió ejerciendo como abogado.

Tras conocerse la imputación y orden de detención del fiscal Vázquez contra el comerciante Cejas, el destituído fiscal Roberto Matheu le dijo a Alcatraz Revista: Yo fui víctima de una operación judicial. Dos funcionarios oficialistas me armaron esta causa, porque yo los había investigado e imputado por haber amenazado en estado de ebriedad a un abogado. Con esta condena me están cobrando una deuda por haberme negado a recibir órdenes políticas”, acusó Matheu.

Y detalló: “En 2009, Ariel Cejas vino a mi despacho a disculparse por haberme acusado falsamente en la Instrucción de la caua en mi contra. En el juicio, el testigo Rodolfo Orlando Donghi declaró como testigo y bajo juramento que Ariel Cejas siempre repetía que lo habían apretado para declarar en mi contra, bajo condición de quitarle el carro y la concesión del servicio de gastronomía. Nada de eso se tuvo en cuenta y están las filmaciones del juicio con estas irregularidades”.

Roberto Matheu agregó que “a mi me condenaron el 14 de septiembre de 2016; y dos días después, sólo 48 horas después de esa condena; el hermano de Cejas, Raúl Iván Cejas, que había sido condenado a 11 años y medio de prisión por un hecho de robo calificado, recibió el beneficio de la prisión domiciliaria para cuidar a su padre enfermo. Resulta todo muy sospechoso; y ahora, el tiempo me dio la razón con esta imputación contra Ariel Cejas”.

Por su parte, Alejandro Zeverín, defensor de Matheu declaró a Alcatraz Revista que “para comprender la impunidad de Cejas y su importancia hay que remontarse a la Causa Matheu. Solo así se la comprende, al igual que el rol que este señor Cejas cumplió en Tribunales durante muchos años. También queda expuesto qué fiscales han cobrado coimas y quiénes no; y que había que sacarlos del medio en aquella oportunidad”.

Zeverín agregó que “la bala de plata para probar toda esas cosas  parte de la actitud de los jueces de la Cámara 7ª en la Causa Matheu: se probó que Ariel Cejas tenía protección importante de fiscales y jueces de Control; que la Cámara 7ª ignoró investigar las declaraciones testimoniales no cuestionadas que involucraban a Cejas en arreglos exitosos por dinero para liberar presos; que se suprimió el Acta de Debate donde Cejas admitió que si no declaraba “guionado” contra Roberto Matheu, desde la Superintendencia del Tribunal Superior de Justicia le quitarían la concesión del kiosco y le prohibirian el aacceso a Tribunales II”.

El defensor del fiscal Matheu sostuvo que “la única declaración que involucró a mi cliente fue la de Cejas, y tuvo un precio: la liberación de su hermano Raúl Cejas, un peligroso delincuente condenado a 11años y 8 meses de prisión por asalto y balear policia, realizada a través de juez de Ejecución Penal Cristóbal Laje. También debo decir que el fiscal de Cámara, Marcelo Hidalgo, pactó con el abogado Manuel Calderón, defensor del imputado Morelli una confesión a cambio de prisión condicional y no suspensión de matrícula. Este mismo Calderón fue el mismo que patrocinó a Raúl Cejas, a quién el juez laje le dio prisión domiciliaria, pagando los favores en la Causa Matheu”.

La investigación del fiscal Horacio Vázquez, que tiene como sospechoso de estafas a Juan Ariel Cejas puede ser la punta de la madeja que ventile cómo funcionaba la trenza, un sistema de Justicia paralela que compraba libertades de delincuentes, beneficiando a abogados y funcionarios judiciales corruptos.