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«Inexplicable» muerte de una niña en un hospital de Rosario

Lis, de 9 años, llegó al nosocomio por un cuadro de diarrea y vómitos. Pese a la mejora, el domingo registró fiebre y luego dos ataques cardíacos. "No tenemos respuesta", dijo el director del centro.

Según publica el medio Rosario 3, Lis comenzó a sentirse mal el viernes y, con la aparición del sábado de fiebre, el padre la llevó al Hospital de Niños Zona Norte.

Desde el centro de salud indicaron que decidieron internar a la nena para un mayor control y análisis, e informaron que “varios chicos” estaban en la guardia con el mismo síntoma.

La abuela relató que pese a la mejora que presentaba, a los 8 del domingo le apareció fiebre. “Lis transpiraba mal, estaba toda empapada. Comenzó a hablar cosas sin sentido”, dijo Sandra.

Buscó a buscar a una enfermera y resultó que la niña tenía 39 de fiebre. Le dijeron que ya le habían dado un antifebril y le acercaron gasas mojadas. Sandra contó que el agua hizo que se le mojara la cinta que sostenía la entrada del suero por lo cual también le avisó eso a la enfermera.

Entonces fueron a cambiar la manguerita, pero una médica que llegó atrás de la enfermera ordenó que no le pusieran el suero, para intentar hidratarla por boca.

Como toleró el agua, después le llevaron una gelatina para que volviera a comer. Pero cerca del mediodía del domingo “la nena se acostó y se le empezaron a enfriar las piernas». «De la cintura para abajo estaba todo congelado. Y de la cintura para arriba eran 40 grados”, describió.

La abuela de la niña dijo que entonces volvió a llamar a la enfermera, “y era como que la estaba molestando». «Están con el celular, cafecito, matecito”, añadió. Cuando fue a la habitación, le quiso tomar la temperatura con un “broche” en el piecito y “ya no le marcaba nada”.

“Ahí se pusieron nerviosos, empezaron a venir médicos y enfermeras. Apareció la doctora y le toma los latidos, le toca la panza, la nena se queja del dolor. La sentaron en una camilla y la nena empezó con una taquicardia, cada vez peor”, continuó Sandra.

Precisó que le colocaron cuatro inyectables en cuatro minutos y que la retiraron para comenzar a hacer maniobras de resucitación a la nena. Luego, confirmaron el deceso por dos paros cardíacos.

El director del hospital, Eduardo Casim, no tuvo una respuesta concreta sobre lo ocurrido. “No tenemos desde el punto de vista médico una explicación”, declaró a una radio local.

Confirmó que tras la denuncia por mala praxis que hizo el padre se realizó la autopsia en el Instituto Médico Legal. “Tengo 30 años de pediatra y no logro explicar qué ha pasado”, cerró.

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